La educación como proceso dirigido al ser humano debe atender en primera instancia a la mediación en términos de ella; a los recursos usados para formar, para nuestros días se reconoce la prioridad de articular las tecnologías del caso; concientes que muchas instituciones educativas carecen de los recursos básicos fundamentales para desarrollar actos y procesos de enseñanza bien estructurados.
Entonces planteamos como primera medida una reflexión sobre las estratégias didácticas y los recursos para hacer la enseñabilidad.
En la relación pedagógica, dentro del plano de la educación,otro de los aspectos desconocidos en nuestros días es la articulación entre el aprendizaje y el deseo, con relación a ésta se puede pensar que si al educando no se le ha insertado en su interior esta clave de una manera natural, por parte del motivador, su maestro, dificilmente aspiramos a obtener logros.
SI NO EXISTE EL DESEO HABRÁN DESERCIONES, DESMOTIVACIONES,Y APATÍA ,porque ésta mueve toda nuestra humanidad interior y nos da la fuerza para el querer hacer, hay que estimular para enseñar a aprender y dependerá en gran medida de la forma mágica de los educadores y su interacción con los educandos, para mejorar en gran parte la calidad en el proceso educativo.
¿Cómo hacer surgir el deseo del educando por aprender?
La respuesta está en hacerlo de forma natural, con paciencia, con sabidduría, auto-motivandose para tener disposición, porque no hay una recta, cada maesrto construye su modelo se auto y se re- direcciona, ya que es un acto personal y complejo pero en descubrir en su devenir estrategías didácticas como artista que debe ser el verdadero MAESTRO.